miércoles, 14 de agosto de 2013

El tiempo pasa: Venezuela queda

Cogito ergo sum-. Están pasando las horas, los días, los meses, los años y Venezuela sigue estancada en el peor gobierno que haya pasado por el Palacio de Miraflores; los problemas siguen acumulándose y ¿las soluciones? alejándose cada día más de los hogares de los venezolanos.

Son más de 14 años y durante este tiempo mucho se ha hablado de democracia participativa, del pueblo, del poder comunitario y/o vecinal, pero todo ha sido discurso, palabrería, como decimos en criollito puro "buche y pluma".

Quiero detenerme un instante en el concepto de democracia participativa que tanto esboza el Gobierno nacional, del que tanto se ufanan y vanaglorian, para hacerle a usted, apreciado elector(a), una pregunta: ¿usted participa en verdad en las decisiones reales del país?, y tú, dirigente del Psuv ¿te toman en cuenta por lo menos para elegir al candidato en tu municipio?... La respuesta de seguro será: NO.

Ellos, los poderosos y enchufados, se han caracterizado en estos años por centralizar la economía y el poder, porque mientras hablan del "protagonismos del pueblo" todos los servicios e industrias son nacionalizadas, centralizadas y arrebatadas al poder municipal, principal objeto de la participación local y comunitaria que nos queda, debido a que ellos mismos eliminaron las Juntas Parroquiales.

Es necesario y transcendental abrir un debate social, político e ideológico que permita a los venezolanos sopesar el discurso populista de los enchufados y los reales pensamientos de avanzada nacional, es el momento de evaluar, con la mano puesta en el corazón, a estos 14 años y colocarlos en la balanzas con otras épocas, que con errores también, dejaron conquistas que aún están a la vista.

Ha habido una contaminación histórica en el país, quienes han sostenido las riendas del Estado por casi tres lustros se han encargado de eliminar el pasado nacional y de reescribir nuestras raíces y orígenes. Son ellos los responsables de que hoy se piense en blanco o negro, o para ser más exacto en rojo o azul.

Los venezolanos debemos emprender una rectificación total de nuestra concepción de país, tenemos que asumir el rol que la Divina Providencia nos ofrece, de lo contrario seguiremos sumergiéndonos en el lodazal de los antagonismos desesperados y anárquicos que tanto le han costado a nuestra herida república.

Como demócrata enarbolo las banderas de la caridad política para alcanzar la justicia social mediante el bien común, alcanzando un ajuste decidido, cierto y firme de la realidad social, convergiendo a toda la nación en una orientación plural y participativa que te permita a t y, a todos salir adelante por Venezuela.

Es la solidaridad, el amor, el compromiso de caridad, verdad y justicia lo que hará grande a nuestra patria, confío en esta tierra porque soy nacionalista y siempre lucharé por Venezuela y los venezolanos.

El tiempo pasa, y como ha pasado de lento en estos últimos años, sin embargo ha sido la constancia lo que nos ha permitido seguir adelante hacia la construcción de la nación que necesitamos y merecemos; los meses se suceden uno detrás del otro y lo que pareciera que desconocen los inquilinos del poder es que ellos tienen los días contados en ese enchufe ya sulfatado.


Twitter: @jdsolorzano

No hay comentarios: