miércoles, 19 de diciembre de 2012

Se escuchó el silencio


Cogito ergo sum-. Iban caminando por medio de la soledad de aquella calle. Una brisa fría de esas que anuncian la madrugada lanza un silbido agudo y a la vez eterno, se detienen, no pueden dar un paso más, los atemoriza el increíble ruido de aquel penetrante silencio… Así como si fuera un cuento, quisiera emprender este artículo de opinión para hacer pública mi humilde opinión de lo acontecido en las últimas elecciones.
El 16 de diciembre pasado se estremeció la vida política de este país, los venezolanos tanto del gobierno como de la oposición, y los tantos miles que no les gusta ser calificado de un bando, ni del otro, prefirieron quedarse en casa y permitir que otros eligieron por ellos los gobernadores y diputados regionales, pero ¿por qué esta actitud?, sería bueno pretender responder esta incógnita, que ya muchos han intentado, con más acierto que nosotros, darle contestación.
Si es verdad que el despecho electoral por el fracaso de Henrique Capriles llevó a miles, mejor dicho a millones de electores, a no votar en las regionales, entonces qué motivó a los oficialistas a quedarse en casa, porque si algo es evidente es que mientras en el lado de los demócratas cerca de tres millones de personas no votaron, dentro del gobierno unos cuatro millones también se quedaron en casa; pues parece que propios y extraños no lograron en un caso despertar a sus votantes del “guayabo” caprilero, y del otro espabilarlos del asombro causado por el anuncio de la posible desaparición del escenario político de Hugo Chávez.
Lo cierto es que el domingo pasado lo que se sintió por toda la república fue un silencio aterrador, la mitad de los venezolanos decidieron no votar, lo que debe despertar las alarmas de los dirigentes políticos de ambos sectores, debido a que debe existir una razón sociológica más profunda que la derrota de Capriles y la enfermedad de Chávez que llevó a un pedazo importantísimo de la población a dejarse, como lo expresó Antonio Barreto Sira, ganar por la apatía y la dejadez.
Además del desinterés de los venezolanos para con los comicios regionales es notorio la tensión que se vive en nuestra sociedad, ya se han presentado diferentes connatos violentos en supermercados, abastos y mercados populares, lo que advierte que en la población se mueve un sentimiento de inconformidad que pudiera llevarnos a una explosión social. ¡Alerta!.
Pero regresando al tema electoral, quisiera hacerle un llamamiento a los anzoatiguenses, el pasado 16 de diciembre no elegimos, ni bien, ni mal, porque sencillamente no ejercieron su derecho al voto la mitad del estado, entonces, debemos reflexionar ante este hecho y ver los resultados que trajo consigo el desdén social que dominó a un sector del electorado, no dejemos que esto ocurra nuevamente, porque si pasa volveríamos a condenar nuestro destino a  hacer en las manos más incorrectas.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Yo voto por el de Anzoátegui



Cogito ergo sum-. Soy orgullosamente anzoatiguense, soy defensor de la cultura de nuestro pueblo, no creo en imperialismos antiguos, ni modernos, no  confío en los virreinatos, y menos en los forasteros que vengan a “esbaratar” a nuestra gente y a nuestro estado, por estas razones yo sí voto este domingo 16 de diciembre y lo haré con fuerza, con decisión y con fe en Dios y en el pueblo, porque si todos votamos lo logramos, es decir, tendremos un estado de desarrollo, encuentro y futuro.
Muy temprano, después de tomarme la respectiva tacita de café, saldré a mi centro de votación a cumplir con mi deber, con ese deber que me da la Constitución de Venezuela, con ese que  me otorga el ser un ciudadano más de la esta república, votaré porque es la forma de expresar lo que quiero para mi estado y mi gente; ¡callarme!, ¡jamás!, nunca permitiré que otro decida por mí, con mi voto hablaré este domingo dieciséis.
Ejerceré mi derecho votando por el de aquí, votando por el gallo del patio, por Antonio Barreto Sira, porque sin duda él es el candidato, y será el gobernador que necesitamos en este estado, él es el hombre que decididamente resolverá con respuesta inmediatas los graves problemas que hoy agobian a nuestra sociedad sumida en el mar de la desidia de quienes la han gobernado.
¡Yo voto por el de aquí!. Mi familia en pleno votará por el candidato que construyó, recogiendo de las voces del pueblo, y en medio de los más experimentados profesionales de Anzoátegui, un plan de gobierno real y tangible, un plan de gobierno que se parece a nosotros, porque de alguna manera miles de anzoatiguenses fueron escuchados y sus ideas, planteamientos y necesidades plasmado en un programa hecho por anzoatiguenses para Anzoátegui.  
Diré, para ir culminando este artículo,  como el intrépido Florentino le retrucó al Diablo en el “Reto y la Porfía” de Don Alberto Arvelo Torrealba, con aquella frase lacerante, “Quién ha visto dororo/ cantando con arrendajo”, la pelea electoral anzoatiguense es muy parecida a este verso, porque ¿quién ha visto turista, discutiendo con un baquiano?, por eso sé que Barreto Sira vencerá estas elecciones.
Si votamos lo logramos, este 16 de diciembre la decisión está en tus manos, hay dos opciones la que encarna la imposición, el seguir en fracaso en fracaso, como la que simboliza Aris Turis; y la otra, la de aquí, la que representa el sentir de nuestro pueblo, la que se parece a cada uno de nosotros, porque posee sabor anzoatiguense, esa es  la de Barreto Sira.
Yo votaré este 16 de diciembre en contra de las amenazas de Aris en contra de los trabajadores de la gobernación, votaré en contra de Aris porque él insulta periodistas, y se burla del dolor ajeno, lo haré en contra del turista porque está rodeado de sus nuevos amigos del alma, David De Lima, Dennis Balza y compañía.
Votaré a favor de Antonio Barreto Sira porque es un gerente comprobado, porque es un hacedor de sueño como lo hizo en Cantaura, porque lo viene dando Todo por Anzoátegui, porque nos propone obras puntuales como el empuje turístico de la Costa Flamingo que abarca el desarrollo de Boca de Uchire, Puerto Píritu y Lechería, porque él construirá el Muelle de Cruceros para Puerto La Cruz y la Ciudad Hospitalaria para Barcelona, y paremos de contar, ¿quieres más razones para votar por el de aquí?.
¡Votemos y lo lograremos!

viernes, 7 de diciembre de 2012

Desarrollo vs. Improvisación


Opinión-.  Los anzoatiguenses estamos frente  a dos modelos distintos de ver las responsabilidades en la administración pública, estamos delante de dos modelos políticos, estamos entre la bifurcación de dos formas de gobernar.  Y somos cada uno de nosotros los llamados a decidir lo que queremos para Anzoátegui.
Nosotros, todos los electores de este estado, tenemos un compromiso con el futuro de Anzoátegui, nosotros  en este momento estamos debatiendo entre la propuesta de desarrollo que encarna el candidato de la unidad democrática, Antonio Barreto Sira, y aquella que representa el aspirante importado, aquél que nos trajeron como turista, y que sólo nos ha prometido venir a “esbaratar a nuestro estado”.
Mientras uno conociendo las necesidades de nuestra gente, porque cae en el mismo hueco que tú y que yo, porque se le va la luz tantas veces como a cada uno de nosotros, que siente el mismo susto cuando sus hijos salen a la calle, nos propone darlo Todo Por Anzoátegui; el otro su oponente, el representante del continuismo que representa la improvisación que ya lleva más de 14 años destruyendo a nuestra gente, sólo es capaz de aseverar que viene a arrasar con lo poco que han dejado sus compañeros de partido.
Antonio Barreto Sira se rodeó de un experimentado grupo de anzoatiguenses y llevando las peticiones que se recogen día a día entre el pueblo en los caseríos, barrios, y urbanizaciones, que se recopilan conversando con los consejos comunales, estructuró un plan de desarrollo 100% anzoatiguense, hecho por gente de aquí para beneficiar a toda nuestra región. En cambio su oponente, Aristóbulo Istúriz, es el símbolo del fracaso, es la viva imagen de la improvisación, esa que nos ha condenado a vivir bajo un régimen de necesidad verdaderamente socialista porque atenta directamente a todos los anzoatiguenses por igual.
Yo le voy al desarrollo, voto por la mejor opción, esa que encarna el popularmente llamado  “gallo del patio”, porque presenta un programa que abarca soluciones al problema del desempleo, la inseguridad, la insalubridad, porque plantea un compromiso creíble y realizable para el beneficio de todos los anzoatiguenses; mientras el otro, ese que ha venido a turistear, sólo dice tener la experiencia de David De Lima para gobernar, a lo que le respondemos que “hay experiencias que matan”.
Entre el desarrollo y la improvisación yo voto por el desarrollo, este 16 de diciembre, estoy convencido que la mejor alternativa  es la que representa el candidato de la unidad democrática. Te invito a salir a votar por el aspirante que nos afirma que lo dará todo con todos para hacer de este el mejor estado de Venezuela.
¡Anzoatiguense vota!; vota por Anzoátegui en la tarjeta de tu preferencia, aunque como socialcristiano sellaré la verde, esa que simboliza la solvencia moral de los venezolanos, esa que nos habla de un país de encuentro y con la mirada puesta en el futuro.
El destino de nuestro estado está en nuestras manos, vamos todos a expresarnos.