martes, 28 de marzo de 2017

Análisis validado

Cogito ergo sum (Puerto La Cruz)-.  Aunque aún no termina el proceso de validación de todos los partidos que fueron sometidos a esta corroboración de su militancia, quisiera adelantar unas líneas de análisis sobre esta medición.

Primero, a pesar que los voceros de la Unidad se  empeñen en negarlo, la validación encierra una medición de poder de movilización entre las diversas organizaciones dentro y fuera de la Unidad Democrática.

Todas las agrupaciones hicieron y hacen lo propio para demostrar su “músculo” electoral, y mostrar sus colmillos.

Vemos como Acción Democrática se impuso en el estado, dejando atrás a Primero Justicia y Voluntad Popular, y también es resaltante acotar que el partido de Capriles y de Borges superó a la organización comandada por Leopoldo López, quedando en segundo y tercer lugar respectivamente.

En Barcelona, a pesar que en las más recientes mediciones la tarjeta amarilla obtuvo más votos que la blanca, ahora con la dirección y organización de Plácido Malavé los adecos lograron rescatar su sitial de primera fuerza política en la localidad.

En los eventos electorales donde aparecieron las tarjetas de los partidos de la Unidad, los justicieros se habían impuesto sobre los adecos en Barcelona, mas esta historia cambió con la nueva dirección política que asumió el Comité Ejecutivo Municipal de los socialdemócratas barceloneses.

En Lechería, quedó marcado que Primero Justicia siguen siendo el factor fundamental de la ciudad; ni el empuje de Voluntad Popular pudo hacer mella.

Aunque es menester afirmar que una participación más militante del concejal Oscar Navas hubiese podido mejorar los números de VP en Urbaneja.  Fue un error de Voluntad Popular dejar el proceso en manos de un peso pluma de la política como es Manuel Ferreira.

Guanta, escenario de un duro pugilato entre el concejal Luis Gil (PJ) y el excandidato a alcalde Isrrael Caraballo (VP), fue controlado por los aurinegros.

Gil logró obtener más validantes que Caraballo, lo que constituye un avance importante para el edil y una de las figuras políticas más destacadas del municipio portuario.

El grueso de los municipios de Anzoátegui se tiñeron de blanco; Acción Democrática se impuso en la mayoría de los municipios del centro-sur de Anzoátegui y en la totalidad de las jurisdicciones del oeste de la entidad.

Salvo el municipio Simón Rodríguez (El Tigre) no fue dominado por los acciondemocratistas, localidad donde el justiciero José Brito logró imponerse.  No obstante  es importante subrayar que muchos socialdemócratas, más de 1500, se quedaron en las colas sin validar a AD. Tal vez esto hubiese volteado la tortilla en favor de los blancos.  

AD tuvo que movilizar sus militantes de Barcelona a Guanta, de Anaco a Santa Ana y de El Tigre a Soledad, como una táctica para descongestionar las ciudades más densas y ubicar sus validantes en localidades más fáciles, esto debido por los obstáculos impuestos por el ente comicial.

Por su lado, Copei batalló contra una tendencia interna que llamó a no validar, las jugadas del CNE, la desinformación y el desánimo de parte de su militancia.


Ahora, los verdes tendrán que acudir al proceso de reparo pautado para mayo y así mantener sus históricas siglas en el panorama político venezolano. 

miércoles, 22 de marzo de 2017

Vidas vacías

Cogito ergo sum (Puerto La Cruz)-.  3:40 am. Como estaba previsto la alarma del teléfono empezó a sonar, con ese timbre desproporcionado en relación al tamaño del aparato que lo genera.

De un salto, arrebatándose de encima las sábanas, se puso de pie. Aún soñoliento tanteó por la mesa de noche en búsqueda del generador de tan espantoso ruido.

Y lo encontró. Con los párpados  aún pegados entre sí detuvo el espeluznante resonar de la alarma y haciendo un esfuerzo sobrehumano, en medio de las penumbras del cuarto, verificó si su esposa aún dormía.

Pero, ella como siempre ya estaba erguida tratando de alisar a duras penas los vestigios de la cama deshecha.

Mientras él se cepillaba, afeitaba y alistaba para ir a trabajar, ella fue a verificar que su niña aún dominaba, el sueño de los inocentes,  en su cuna prestada.

Luego de vestido, el hombre pasó por la cocina, donde su esposa había podido hacerle una arepa con mantequilla, porque el poco queso que le quedaba lo iban a dejar para que desayunarán sus otros hijos que seguían en sus respectivas camas.

El hombre dándole un beso a su esposa, de esos que saben a rutina y que están huérfanos de la pasión de años idos. Tomó una mochila y fue rumbo al trabajo.

4:40am. Ya en la parada, con un cielo aún ennegrecido, esperaba el autobús. Sus brazos cruzados, como abrazándose a sí mismo, intentaban en vano protegerle de aquel hilo de brisa gélida, que en ocasiones sopla en aquellas horas de madrugada.

Se montó en el transporte público, que a esas horas aún lucía vacío y con la orfandad típica de esos instantes del día.

Ya a las 5:40am, luego de tomar dos colectivos llegó a su puesto de trabajo.

Buscó el café y la cafetera para prepararse aquella infusión que atrae a tantos, enamora a otros, y que vitaliza a más de uno, pero el envase estaba vacío.

Se frotó la cara como dándose fuerzas, y tal vez para terminar de despertarse. Debido a la falta de café tuvo que precipitarse al cuarto de baño a ahogarse en un chorro de agua para tratar de espantar el sueño que aún se resistía a abandonar su cuerpo y darle espacio a sus ánimos perdidos desde el día anterior.

La faena transcurrió como siempre. Y a la hora del mediodía, tuvo que contentarse con dos o tres vasos de agua, eso sí bien fría, para engañar al estómago que exigía su ración de alimentos de entre 12 y 1 de la tarde.

Pasaron y pasaron los segundos, los minutos y las horas. Y el reloj volvió a sonar: La jornada había concluido.

Y otra vez para la casa; luego de emprender la guerra diaria en el transporte público, esa que inicia a las 5pm y termina como a las 6pm, llegó a su hogar.

En silencio, cabizbajo, abrió las puertas de su nevera.

La luz del refrigerador iluminó la nada. Sólo una jarra de agua fría le picaba un ojo, pero el gruñir de sus entrañas se intensificaba a cada instante.

Volteó y vio a su mujer. Ésta le dijo: “lo que había se lo di a los niños”.

Él sonrió, la miró fijamente y mintió: “no te preocupes mi amor, ya había comido algo antes de venir

Y así transcurren los días en una Venezuela vacía por culpa de aquellos que desangraron a nuestra amada nación.


viernes, 17 de marzo de 2017

Maduro: Peón de Putin

Cogito ergo sum (Puerto La Cruz)-.  Nicolás Maduro es un peón en el tablero de la estrategia de geo-política que lleva adelante Vladimir Putin, la cual está en clara y evidencia “luna de miel” con el Presidente de los Estados Unidos, Donadl Trump.

El presidente de la Federación Rusa se mueve para mantener la influencia de su país sobre el este de Europa, y para ello mira con buenos ojos la nueva relación con el titán del norte de América y antiguo antagonista.

En el mapa mundial que se está dibujando a raíz del triunfo de los republicanos en los EEUU muestra que estamos viviendo una etapa muy diferencia a la vivida durante la administración de Barack Obama.
Los “gringos” están volteando su mirada al sur del continente, y pretenden parar los avances que tanto rusos como chinos lograron durante la timorata política internacional de los demócratas.

Frente a esto los movimientos internacionales de la “petro-diplomacia” venezolana están perdiendo efecto en la medida que su chequera se va enflaqueciendo por la merma en los precios del petróleo.

Además, que sea Trump quien esté ocupando la Casa Blanca, empeora más la situación de Nicolás Maduro, y éste muy bien lo sabe.

Vemos como la administración Trump ha emprendido contactos con los presidentes del hemisferio y han abordado el caso venezolano, siempre expresando “su preocupación” por lo que acontece dentro de la nación.

El hecho que se recibiera en la Casa Blanca a Lilian Tintori, esposa del preso político más emblemático del régimen, Leopoldo López, constituyó una bofetada diplomática sin parangón en la historia reciente.

Mientras esto ocurre, Nicolás Maduro busca desesperadamente los brazos protectores del histórico Kremlin de Moscú, no obstante Putin no está en la disposición de iniciar una pelea con los Estados Unidos por Venezuela.

Si Nicolás pretende reeditar el caso de Cuba y  de la extinta Unión Soviética, está errando de cabo a rabo su estrategia. Ni estamos en los tiempos de la Guerra Fría, ni Maduro es Castro, ni Putin es Nikita Jruschov.

Para la Rusia de hoy en día, América del Sur y sobre todo Venezuela, son piezas de intercambio político con los estadounidenses. Y pareciera que en Caracas no se han percatado de esta realidad.

Entonces, desear el cariño cuidadoso y paternal de Rusia es una imposibilidad diplomática y política en el contexto actual, por más chatarra militar que Venezuela les compre a los exsoviéticos éstos no harán una coalición internacional para defender nada, ni a nadie en este lado del mundo.

Y Mientras tanto Donald Trump sigue avanzando en el continente americano echando por tierra todas las políticas permisivas y blandengues que caracterizaron las relaciones hacia América del Sur durante los días de Obama.  

¿Y China? Sabemos de los intereses de los asiáticos en Sudamérica, pero en este momento los chinos deben preocuparse más por la latente alianza EEUU-Rusia y cómo está los colocaría en minusvalía política y económica.

En pocas palabras, en cualquier movimiento en el tablero de ajedrez el señor Maduro será utilizando como un simple peón en medio de la estrategia rusa, china o norteamericana.

¡Simple! ¡Sin más detalles!



martes, 7 de marzo de 2017

Dios, oración y combate

Cogito ergo sum (Puerto La Cruz)-.  “Sólo una relación real con Dios (oración) nos da la fuerza para vivir intensamente todos los acontecimientos, especialmente los más dolorosos”, Papa Benedicto XVI.

Lo reafirmo en este artículo, Venezuela es el escenario de un combate sin cuartel, de una batalla política, social, ideológica, y aunque muchos lo pongan en duda, es el campo de enfrentamiento de una puja espiritual.

Desde el arribo de Hugo Chávez al poder, se inició un proceso de eliminación de la cultura cristiana en nuestro país.  Durante mucho tiempo, el principal vocero del Gobierno atacó con todo su verbo a la Iglesia Católica, e inclusive coqueteó cínicamente con los hermanos separados, los evangélicos, para crear y profundizar la división entre los cristianos.

Durante el período quien fuese presidente de Venezuela arremetió contra Obispos, Cardenales e inclusive el mismo Papa, Chávez hasta maldijo al pueblo de Israel; llanamente fue un proceso de anticristianismo profundo y extendido.

Chávez unos días se decía católico (para en sí atacar a la Madre Iglesia) y en otras ocasiones se presentaba como protestante, todo en un universo de confusión y división que le facilitaba su empeño de aniquilamiento de la cultura cristiana nacional.

Durante este tiempo vimos como los ataques a la Iglesia y a sus representantes se fueron agudizando y radicalizándose, las tomas de cámara de templos católicos atacados y de imágenes de la Virgen manchada y rota, formaban parte del arrebato de ira del mal, apoderado del gobierno en contra de la fe.
En el marco de este proceso de anticristianismo militante, se dieron cabida y libertad a una serie de expresiones religiosas o seudo-religiosas que pretendía, y aún pretenden, reemplazar la fe cristiana entre nuestro pueblo.

El fervor hacia credos plenamente ajenos a nuestra cultura cristiana, e inclusive divorciada en tiempo y espacio de las antañas creencias  de los pueblos originarios venezolanos, fueron ganando terreno por la práctica que protagonizaron y auspiciaron desde el mismísimo Palacio de Miraflores.

Y después de fallecido Chávez, desde la cúpula del poder se buscó, con un evidente fracaso, crear en torno a éste una nueva fe, religiosa y dogmática. Prácticamente se planteó la construcción de la teología de la revolución.

El “credo de la revolución”, el “Chávez nuestro”, e inclusive la fabricación de un rosario con la faz de Hugo Chávez y Fidel Castro se compaginaban con la nueva terminología de “Comandante Supremo” y “El Eterno”, todo enfilado a constituir del chavismos una religión blasfema y anticristiana.

Y hoy, la lucha religiosa sigue su curso.

Quienes se hacen llamar revolucionarios, continúan en la misma premisa comunista de otrora, ellos quieren la destrucción de la Iglesia Católica, como símbolo de fe cristiana, y también la expresión de todas las iglesias evangélicas o protestantes.

Por algo, el régimen venezolano se siente tan ajusto defendiendo a todos los movimientos fundamentalistas.

Ante a esto, los cristianos tenemos que tener más confianza en Dios que nunca, orar y rezar con más fuerzas y no descuidar  el frente espiritual en este combate por Venezuela.



miércoles, 1 de marzo de 2017

Modas peligrosas

Cogito ergo sum (Puerto La Cruz)-.  “Los que abandonan la tradición de la verdad no escapan hacia algo llamado libertad. Sólo escapan hacia otra cosa que llamamos moda”, así lo dijo Gilbert Keith Chesterton.

Las modas, además de pasajeras, son sumamente peligrosas y más cuando nos referimos a modas sociales o políticas.

Hace 18 años inició una “moda” en el continente, con el arribo de Hugo Chávez al poder se extendió por Sudamérica una tendencia “revolucionaria” de cambios sociales que se hizo, primero eco y después gobiernos en gran parte de nuestra tierra continental.

Argentina, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, muchos países del Sur y Centro de América fueron presas de esta moda social que parteó una de las etapas más grises de nuestra historia hermanada.

La moda de la izquierda se hizo más fuerte que nunca; andar por las calles con una camiseta con un “Che” Guevara pintado en el pecho era la tendencia, era lo bueno y lo que daba prestigio.

Había regresado, para esos días, la moda que en la década de los 60 también contagió como fiebre demencial a muchas de la juventud de entonces.

La gran diferencia es que la izquierda de los sesenta no llegó al poder, pero su nueva versión si lo hizo con consecuencias nefastas para nuestros pueblos.

La persecución política, la grosería popularizada e institucionalizada, el miedo, el cercenamiento de libertades públicas, el acoso y la sistemática opresión hacia a aquel que piensa diferente, se transformaron en prácticas extendidas, aceptas, imitadas y, sálveme Dios, hasta respetadas por los diversos gobiernos del continente.

La moda del bravucón de barrio voceando consignas anti-imperialistas, reviviendo frases de la guerra de la guerrilla, resucitando entre los muertos el Muro de Berlín y la extinta Unión de Repúblicas Socialistas y Soviéticas (URSS), simbolizó el pandemónium desatado.

Los venezolanos, argentinos, ecuatorianos, brasileños, uruguayos, bolivianos, y en menor medida colombianos, peruanos y paraguayos, se hicieron eco de esta tendencia escalofriante, y permitieron que la izquierda cargada de revanchismos absurdos, de odios enquistados de antaño, de retaliación oxidada por el tiempo, accediera al poder.

Hoy, todos los países están viviendo la amarga experiencia, y la obscena consecuencia, de esta “moda” política que a veces trajeó con saco y corbata, en otras con uniforme militar y boina roja.

Fue una “moda” peligrosa para nuestros pueblos, y a pesar que su presencia se minimiza en el mundo americano, persisten vestigios cancerígenos en el poder.

Sigue Nicolás Maduro en Miraflores, el llamado “correismo” tiene  esperanzas, aunque cada vez menores, de retener el coroto en Ecuador.

Todos los pueblos de América Latina, y sobre todo el venezolano, tiene que aprender la lección de esta “moda”.

La antipolítica, la izquierda revanchista y destructora, el militarismo a la cubana, tienen que ser recordado en su dimensión caótica y aniquiladora que estamos aun padeciendo.

¡Cuidado con las modas! Cuidado con la anti política militante y enemiga de las ideologías, pero éstas son parteras de caos históricos.