Cogito ergo sum (Puerto
La Cruz)-. Después de
15 años de una deuda laboral y moral, tuvo que llegar alguien responsable para
que en cuatro meses se lograra sincerar los sueldos y salarios de los docentes
y los trabajadores de la salud del estado Anzoátegui.
Hace unos días el
gobernador Antonio Barreto Sira hizo justicia con los médicos, enfermeras,
personal obrero y administrativo del área de salud al homologar sus sueldos con
los de aquellos que son dependientes del Gobierno nacional.
Desde el 2002 se fue
abriendo una brecha entre los ingresos de los médicos y docentes regionales con
respecto a sus homólogos nacionales, la cual cada vez se hacía abismal e
imposible de nivelar.
Años tras años la
injusticia se hacía más grande y la falta de voluntad política se palpaba en el
aire, tuvo que instalarse en la gobernación anzoatiguense un gobierno demócrata
para poder alcanzar el objetivo de igualar salarialmente a ambos trabajadores.
Durante 15 años se fue
agravando un problema que pudo haberse solventado hace mucho tiempo atrás; la
acción del nuevo gobierno solo demuestra que tan solo faltaba deseos de hacer
las cosas y voluntad para materializarlas.
Barreto Sira explicó,
durante una rueda de prensa, que el índice porcentual de la homologación fue
del 102% en el caso del sector salud y de 140% en el de educación. En el
primero, se beneficiaron 2.871 médicos, enfermeras, obreros y trabajadores
administrativos, y en el segundo 3.564 docente que imparten clase en las aulas
de unidades educativas dependientes del ejecutivo regional.
Y esto se logró gracias
a que rompiendo las barreras del dogmatismo, colocando las diferencias a un
lado, el gobernador inició un peregrinaje ministerio por ministerio, hasta
llegar a la Vicepresidencia de la República, y así obtener el presupuesto para
poder homologar a estos servidores del estado.
Sin mezquindades, y
manteniendo su firmeza y compromiso de lucha, nuestro gobernador le explicó al
Gobierno central la injusticia que en, usando las palabras del mandatario
regional, “dos médicos, con el mismo título, con los mismos años de servicios,
en el mismo quirófano, devengaban ingresos distintos; el galeno adscrito a la
gobernación obtenía por su trabajo la mitad del sueldo de su colega que es
empleado del Gobierno nacional”.
Así se detalló la
situación, y con argumentos claros,
análisis de los índices de remuneración de unos y otros, y con gallardía el
gobernador demócrata hizo lo que ningún otro mandatario de este estado, por los
últimos tres lustros, no había podido hacer.
Los docentes regionales
se homologaron con sus pares nacionales; los médicos y demás integrantes del
sector igual. E incluso, es menester decirlo, con esta inversión de 86.980.080.883
bolívares para los trabajadores del área de salud y 37.636.662.398 bolívares
para el educativo, aunados con otros beneficios que los regionales cuentan,
poseen en la actualidad un sueldo integral superior a sus homólogos.
Cuando alguien se
pregunta ¿qué hace el gobernador Barreto Sira? La respuesta la da él mismo con
hechos, más allá de las cámaras de televisión y de fotografía, nuestro
mandatario está haciendo el trabajo de hormiguita que se debe hacer para
consolidar el cambio positivo para Anzoátegui.
Sin duda, Anzoátegui
está en movimiento.