martes, 25 de febrero de 2014

Rebeldía vs. Colaboracionistas

Cogito ergo sum-. ¡Escuchen! Hagan silencio por un breve momento y así lo oirán clarito, como si no hubiesen pasado más de 200 años.

Simón Bolívar
En aquella reunión de la Sociedad o Junta Patriótica en Caracas, cuando se discutía sobre la independencia o el apoyo a los reclamos de Fernando VII a la Corona del Imperio Español, cuando algunos eran partidarios a pasos más timoratos y controlados por la calma, un joven dijo:

Que los grandes proyectos deben prepararse en calma. 300 años de calma, ¿no bastan? La Junta Patriótica respeta como debe, al Congreso de la Nación, pero el Congreso debe oír a la Junta Patriótica, centro de luces de todos los intereses revolucionarios. Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad sudamericana, vacilar es perdernos”. Simón Bolívar.

Tal vez no necesitamos recordar mucho para imaginarnos esta escena. Hoy, en la Venezuela ya sumergida en los andares rumbo a la segunda década del siglo XXI, estamos viviendo una realidad semejante a la vivida en aquellos “idus”.  

Tenemos a nuestros Juan Germán Roscio y Francisco Isnardi clamando por salidas más apaciguadas, menos traumáticas e inclusive diplomáticas y por el otro tenemos a nuestros apasionados representantes de los grandes movimientos.

Puede ser, y solo es una lucubración, que la salida de aquellos tiempos sea la misma que se abre como las alamedas frente a cada uno de los venezolanos del presente.

Venezuela hoy está, no entre dos aguas como hemos vivido en los últimos 15 años, sino que estamos en el centro de cuatro vertientes que juegan en medio de la vorágine desatada.

Por un lado la posición de acción de Leopoldo López, que al entregarse a unas autoridades ilegítimas se nos muestra como un líder desinteresado, y junto a María Corina Machado y Antonio Ledezma encarnan la corriente que se mueve en búsqueda de un cambio constitucionalmente efectivo y rápido. En la otra acera encontramos a un Henrique Capriles, quien con pies de plomo prefiere la clama de Roscio e Isnardi.

Leopoldo instantes antes de entregarse
Amén a las dos caras opositoras, el régimen también nuestra sus rostros. Puertas adentro en Miraflores vive la Hidra de Lerna, serpiente mitológica de dos cabezas, por un lado Nicolás con la influencia habanera y fidelista y por otro un Diosdado Cabello que mueve las piezas  con el cuidado de un maestro ajedrecista.

¿Exagero? No para nada: ¿Qué hace Nicolás aseverando, como lo hizo, que existen conspiradores dentro del Gobierno? Y ¿Por qué después de semejante señalamiento Diosdado salió de su mutismo? Usted responda, por favor.

En otra ocasión podremos analizar el discurso de ambos bloques y del cuarteto de posiciones para encontrar en ellos los vestigios de sus razonamientos, siempre ocultos bajo la comunicación política.
¡Lo cierto es que estamos entre rebeldes y colaboracionistas!

La rebeldía de los estudiantes es notoria y justificada debido a que el Gobierno día a día trata de silenciar al pueblo y encapsularlo en una olla de presión sin válvula de escape. ¿Serán algunos opositores como los colaboracionistas franceses que desde la República de Vichy apoyaron a la invasión Nazi? Es el momento de decidir, o por lo menos desde este lado de Venezuela, entre quienes soñamos con una nación próspera y de libertad.

Para finalizar quisiera recordar, como posdata, este fragmento del discurso de José A. Primo que dice:

Juventud en la calle
“Se nos acusa de que somos jóvenes. Dicen que no se pueden arreglar las cosas con el entusiasmo de unos pocos, pero yo os digo si nuestros entusiasmo se desborda arrastrará con él a todos aquellos que amparados en sus años y experiencia pretenden hipotecar el mañana, un mañana que nos pertenece”
¡Qué tan cierto y oportuno! … Vigente, cuando algunos tratan de desestimar un movimiento que no controlan y que no deben controlar: EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL.


Twitter: @jdsolorzano 

martes, 18 de febrero de 2014

Leopoldo: ¡Bravo!

Leopoldo López en acto
Cogito ergo sum-. Hace unos minutos acaba de salir un helicóptero de La Carlota. A esta hora, al escribir, se dice que dentro iba el líder político de la alternativa democrática, Leopoldo López. Sé que saldremos en pocos instantes de la duda, si Dios así lo quiere, sin embargo quise empezar el artículo con este hecho para mostrar el aceleramiento de sucesos que se viven en el país.

Leopoldo, gallarda y valientemente, se entregó en las inmediaciones del Ministerio de Interior, a agentes de la Guardia Nacional, que cada día pierden el Bolivariano de su nombre, éstos lo tomaron bajo su poder y lo embarcaron en una tanqueta, minutos después fue trasladado a una camioneta y de allí a la pista de vuelo.

El líder y fundador de Voluntad Popular demostró la forma de luchar, alguien comentó por Twitter que se había convertido en nuestro Nelson Mandela, y cada instante que pasa los hechos lo van confirmando y corroborando que así es.

María Corina y Leopoldo Lóez
El dirigente político, al lado de María Corina Machado y Antonio Ledezma, emprendieron la ruta hacia la defensa de la Constitución y la democracia, ello le ha arrojado al primero la pérdida de su libertad.

Mientras Leopoldo, rodeado de miles y miles de venezolanos, se entregaba a lo que él mismo calificó “la justicia corrupta de Venezuela”, trabajadores de la industria petrolera, mucho de ellos amenazados, fueron a Caracas a marchar por Nicolás Maduro, y éste tuvo las … “ganas”… de decir que López tenía que responder ante la “justicia por sus delitos”.

¿Cuáles delitos Nicolás?

¡Delitos cometen los Colectivos! Y tú qué haces con respeto a eso. ¡Claro, se me olvidaba, estamos bajo el régimen de lo absurdo!

El pueblo venezolano está hoy más que nunca identificado por la acción política que ha llevado adelante Leopoldo López, su entrega sin tener encima de sus hombros culpa en nada, su valentía y su heroísmo cívico, lo colocan hoy en la primera línea de batalla por el rescate de la libertad nacional.
El momento de su entrega a la GN
Por un lado estaba Nicolás con su acto bastante raquítico y por otro millones de ciudadanos se expresaban no sólo en Caracas sino que en gran parte del país.  Y sin miedo con la frente bien en alto salieron a manifestarse en contra de lo que califican como “dictadura”.

No suelo creer en las coincidencias, en verdad pienso que son “Diosindencias”, que es Él, quien nos pone las cosas al frente para que nosotros seleccionemos lo mejor.

Leopoldo en la tanqueta
El día de las marchas por un lado estaba el oficialismo encamisado de rojo, simbolizando el mal, la sangre, el odio y las bajas pasiones y por el otro estaban miles de estudiantes y de pueblo en general trajeados de blanco representando lo inmaculado de los ideales de democracia y libertad que la mayoría de la nación enarbola.

¡Sí! Es evidente de qué lado está la verdad: De este.

¡Claro! Que algunos pretenden seguir viviendo de una herencia que día a día se va esfumando; Nicolás ha sido como un deudo joven y despilfarrador que echó por la borda, entre parrandas, lujuria e inmadurez, el legado que le habían dejado.

Están las dos caras de la moneda, uno con un poder regalado, traspasado, sin ningún tipo de liderazgo real y verdadero, y por el otro un Leopoldo López que a punta de sacrificios personales y familiares se está erigiendo como un líder.

Por lo que has hecho, por lo que hiciste y por lo que eres capaz de hacer sólo te diré: Leopoldo ¡Bravo!

Con la bandera de Venezuela en las manos




Twitter: @jdsolorzano 

miércoles, 12 de febrero de 2014

12F: Rebelión juvenil

Cogito ergo sum-. Sus rostros eran jóvenes así como sus sueños e ilusiones. ¡Tan parecidos los de ayer, los de hoy, como los de todos los tiempos! Sí, era la muchachada tricolor que vive y siempre vivirá.

Aquél 12 de febrero de 1814 salieron a combatir al más terrible de los tiranos, él era el desorden, la prédica del caos hecha cuerpo y sangre. Lucharon contra José Tomás Boves y sus forajidos.

Si hubieran apostado, todos, simplemente TODOS, hubiesen apoyado a aquel sátrapa de orilla, que su sólo nombre hacía poner al más guapo la piel de gallina. Y así todos hubieran perdido sus monedas, porque aquí, igual que en la Biblia, David venció a Goliat.

El General José Félix Ribas conociendo la apremiante situación que lo rodeaba, y entendiendo que sus escasas tropas por sí solas no podían hacerle frente al ejército realista ordenó el enrolamiento de todos los estudiantes de la ciudad de la Victoria, y aquellos adolescentes, algunos de pantalón corto con disposición y honor levantaron las banderas de la libertad.

Alrededor de mil jóvenes, armados especialmente con su fe y determinación, salieron a batallar. Cerca de 85 estudiantes del Seminario de Santa Rosa de Lima se echaron a la ataque con devoción por lo justo.

Palabras más, palabras menos, luego de una jornada entera de forcejeos entre los mozalbetes patriotas y los asesinos realistas, los primeros resistieron con valentía y cuando el ocaso llegó, y luego de recibir el apoyo de 220 jinetes a las órdenes de Vicente Campo Elías, hicieron retroceder al “urogallo”.

Ese mismo espíritu de mucha y de esperanza. Esa sensación de vencer obstáculos y de avanzar rumbo al mañana es lo que nos permite hoy  seguir adelante; a inicios del siglo pasado otras generaciones la del 28 y 36, se impusieron a modelos de represión y por sus esfuerzos nació la democracia.

¡Entonces! No podemos negar nuestra estirpe de guerreros. La generación de quien escribe, esa que aún no llega a los 30 años o que no supera los 35, estuvo batallando duramente, en aquellos días en que decir que no se era “chavista” era un pecado casi mortal.

Nosotros, éramos pocos y sin embargo protagonizamos una reyerta histórica que mantuvo viva la esperanza en el mañana. Éramos minúsculos en número y sin duda alguna unos gigantes en la fe y en los pensamientos de amor hacia la nación; luego vino el Movimiento Estudiantil que marcó un hito en nuestra lucha contra el socialismo hambreador.

Todos, absolutamente todos, hemos sido importantes y lo seguiremos siendo.

Al momento de redactar estas líneas veo, siento, palpo a esa juventud que sale de la Universidad de Oriente, de la Universidad Santa María, de la Gran Mariscal de Ayacucho, del Santiago Mariño, aquí en Puerto La Cruz, a protestar por la Venezuela que ellos merecen y por la cual están dispuestos a guerrear.

Observamos como el país nacional se vuelca a las calles a manifestar su inconformidad…

Este 12 de Febrero, Día de la Juventud, día de José Félix Ribas y de sus valientes jóvenes, día de la muchachada tricolor que está hoy más activa que nunca, en la calle batallando, soñando y creando futuro, se demostró que no hay nada, ni nadie que paralice a la juventud venezolana.

La unidad en la calle es con sabor popular, juvenil y cada vez más masivo.

PD: Hagan silencio absoluto… Escuchen, ¡Sí, escuchen!... ¡Lo escuchan! Eso que suena son los dientes de Maduro que tiritan del miedo.  


Twitter: @jdsolorzano 

martes, 11 de febrero de 2014

Activismo en Redes Sociales

Mar de Leva-.  De qué hablamos, en este caso, al referirnos a Activismo en Redes Sociales, ¿será que hablamos sobre la Primavera Árabe o de la campaña presidencial de Barack Obama? ¿De qué hablamos a ciencia cierta?

Los venezolanos históricamente nos hemos apoyado en los medios de comunicación social para emprender nuestras acciones políticas, por eso el Libertador acuñó la frase de la “artillería del pensamiento” al referirse a su Correo del Orinoco y por ende la Guerra Federal tiene su génesis en el periódico  El Venezolano.

Los movimientos históricos poseen en todos los países su evolución. Las vicisitudes del siglo XXI convertidas, en el caso venezolano en una tristemente célebre revolución, nos llevó a atrincherar las baterías de la libertad en los canales de televisión, algunas emisoras de radio y diarios, sin embargo el cerco comunicacional, tejido por el socialismo actual, fue minimizando estos espacios de lucha.

¿Qué nos está quedando?

Para ti y para mí lo único que nos queda es el poder en nuestras manos, es decir, los dispositivos móviles de comunicación y la capacidad, que aún tenemos, de estar conectados, en pocas palabras: EL INTERNET como herramienta de lucha informativa.

Los medios tradicionales están hoy en una grave situación  debido al ahogamiento por leyes cada vez menos democráticas, hostigados por la ausencia de papel y demás métodos maquiavélicos de presión empleados por el Estado para lograr su objetivo: EL SILENCIO.

Toda esta realidad ha empoderado a las Redes Sociales como el método idóneo para batallar en contra de un régimen cada vez más autocrático, totalitario y cínico.

De allí nace el activismo en Redes Sociales; la necesidad que tú, que yo, que todos nosotros nos convirtamos en generadores de contenidos e información, multiplicadores de mensajes y de la verdad…

OJO: ¡De la verdad! porque debemos analizar con mucho cuidado lo que difundimos, verificando en todo momento las informaciones y ajustándola a la necesidad que todos poseemos de conocer lo cierto.

En conversaciones, muchas de ellas informales, con Carmen Beatriz Fernández, experta en esta área, así como en diálogos cada vez más fructíferos con profesionales apasionados de esta área como Anyinet Salom, Ana Alves, y Daniel Dominguez, entre muchos más, surgen conceptos, teorías e inclusive filosofía de cómo nace, cómo se desarrolla y cómo se multiplica éste fenómeno en nuestra incipiente sociedad de lucha 2.0.

Los dirigentes nacionales como Leopoldo López, María Corina Machado y otros han sido muy claros en denunciar el “silenciamiento masivo” como estrategia política oficial y han resaltado el valor de las Redes Sociales en la proliferación de información veraz y oportuna.

A esta hora en Venezuela los teléfonos celulares, las Tablet, las computadoras, mediante la conexión a Twitter, Facebook, Youtube, entre otras plataformas de comunicación digital, son los utensilios que poseemos para seguir combatiendo por los sueños.

Para los regímenes, como el actual en Venezuela, la simple mensajería de texto es un dolor de cabeza, porque la libre información es muy peligrosa para aquellos que tienen mucho que ocultar.

El activismo digital, el llamado periodismo de calle es hoy por hoy la fórmula para avanzar, como diría el buen amigo Daniel Domínguez es #LaSalida a la actual situación de país que enfrentamos.

Recuerden: Tuiteen, tuiteen que al tuitear algo queda.

Twitter: @jdsolorzano


martes, 4 de febrero de 2014

¿Cómo olvidar?

Cogito ergo sum-. Salíamos de Caracas esa noche, mi padre había comprado un automóvil; íbamos los tres juntos luego de una breve estadía en la capital. ¡Sí! Notamos un  movimiento raro en las calles de aquella ciudad, sin embargo nada que supondría lo que más tarde sería un hecho.

Rodamos con el carro nuevo hasta llegar a Puerto La Cruz. Ya era de mañana, el sol brillaba.

Corriendo salí, con la energía que me daba el poseer apenas 7 años de edad, a encender el televisor del cuarto de mis padres mientras estos cansados desempacaban.

La imagen en la televisión era como un película de acción, se veían hombres de uniforme deambulando por todos lados, protegidos por carros que servían de barricadas y una reportera trataba de reseñar los sucesos.
Pensé, como parte de la inocencia de aquellos días, que era un film de guerra; la equivocación infantil rápidamente fue disipada.

Mi madre volteó a ver lo que se transmitía por la pequeña pantalla.

“¿Qué? están dando un golpe de estado”, esa fue la expresión que recuerdo como si fuera ayer. Mis padres que estaban ensimismados en sus azares le prestaron atención a lo que se informaba por los medios de comunicación.

Recordamos, o más bien ellos recordaron, que nos habíamos topado con una tanqueta, en ese momento el comentario fue normal, “tranquilo, seguro va hacia el cuartel”.

La realidad era otra era uno de los destacamentos alzados en contra de Carlos Andrés Pérez, el presidente que el pueblo venezolano había elegido en elecciones democráticas.

Al poco tiempo las informaciones fueron apareciendo. Poco después el señor Presidente salía por los medios de comunicación: “Todo está en calma”… “la sublevación ha sido controlada”.

Era cierto, los golpista estaban diezmados en la ciudad de Caracas, sin embargo el cristal de la democracia se había roto por completo.

Recuerdo este episodio de mi niñez, para entablar con ustedes apreciados lectores un análisis que va más allá de la difusión memoria de un infante. Para preguntarles ¿Es que vamos a permitirnos el pecado de olvidar la cantidad de muertos militares y civiles del 4 de febrero de 1992?

¿Será acaso que dejaremos que la única versión que sea relatada a los jóvenes, que ni siquiera habían nacido en esos días, sea la que ellos manejan? ¿Dejaremos pasar el strike de la celebración de un día negro para el país y la democracia?

Tenemos que darle un parao a esto; ninguno de los venezolanos que tenemos memoria podemos aceptar que se trate al 4 de febrero como un día de “gloria” nacional, porque ese día, señores y señoras, el país se nos vino abajo.

Por años ellos, los enchufados del gobierno, hablaban de una rebelión cívico-militar, creo sin duda alguna que su GOLPE de estado no fue cívico, sino que su actitud de ayer y de hoy es “cínica”; ellos no contaron con el pueblo el 4F, eso es totalmente falso, los venezolanos se quedaron en un 99% de los casos en sus casas.

Un movimiento cívico, que contó con el apoyo militar, fue el 23 de enero de 1958. ¡Y esa fecha es vilipendiada por los eruditos rojos!

Sin entrar en pormenores sobre el 23-E, de lo cual tengo como nacionalista mis ideas claras, les puedo decir que los venezolanos que nos duele el país, que sentimos la sangre correr por nuestro cuerpo no podemos dejar que solamente los oficialistas cuenten la historia.

Está prohibido olvidar… Porque al hacerlo traicionamos la memoria de tantos hombres y mujeres que han perdido la vida a lo largo de estos últimos 22 años.


Twitter: @jdsolorzano