Cogito ergo sum-. Cunde el pánico en el seno del oficialismo. Tres millones de voluntades se expresaron sin miedo, con la valentía del demócrata durante la fiesta electoral de las primarias de este 12 de febrero. Inició nuestra campaña por el rescate de la libertad en Venezuela.
Mientras los voceros del chavismo se empeñaban en profetizar una debacle electoral en la consulta primaria de la oposición, mientras los pensadores de boinas carmesí se concentraban en disparar con la metralla de su verbo de odio contra las primarias de la alternativa democrática, los diferentes líderes políticos demócratas continuaban su trabajo de llevarles a los venezolanos una propuesta diferente, un mensaje de reencuentro y trabajo para todos.
La sala situacional de Miraflores ya sabía desde temprano la enorme cantidad de electores que se movilizaban para seleccionar no sólo a quien será el rival electoral del Jefe de Estado, actual y por ahora, sino para escoger a los abanderados de la oposición para las gobernaciones y alcaldías. Millones de venezolanos dejaron su temor a un lado y se manifestaron en las urnas electorales, de esta forma se amaneció el 13 de febrero con los nuevos candidatos de la unidad.
El chavismo sabe y entiende, aunque tozudamente lo negará hasta el final, que la votación de tres millones de votantes no es el capital total de electores de la oposición sino que es tan sólo su base electoral, es decir, lo que llamamos comúnmente los votos duros de la alternativa democrática. Ante esta realidad el oficialismo estudia su panorama, ya aquello de escuálidos no se aplica a la realidad, el chavismo en el 2008 efectúo una consulta de base para seleccionar abanderados regionales y municipales, debido a que el presidencial es intocable típico en los regímenes autocráticos como el nuestro, y sólo acudieron a votar un poco más de 500 mil venezolanos, en comparación a la vivida el 12 de febrero se impone la supremacía de la oposición, ya los escuálidos son otros.
Hugo Chávez Frías está al tanto de esta situación, ya sabe que tiene un oponente con un piso político de tres millones de venezolanos que están resteados en contra de su gobierno, debe entender que esa cifra, como dicen las estadísticas y las proyecciones, se convierten en el doble en la contienda electoral abierta, es decir, la oposición debe estar rondando los seis millones de electores para el 7 de octubre… y se sienten el traqueo de los dientes en Miraflores, el miedo es libre y ellos lo ejercen con devoción. Ahora la cita es el 7 de octubre, tenemos candidato presidencial, ellos también, como diría un amigo que hablen los números.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario